El 20 Congreso Nacional de Capacitación
Judicial, El Bicentenario y la Capacitación Judicial: Análisis y Perspectivas,
se llevó a cabo en la ciudad de Córdoba los días tres y cuatro de noviembre del
año dos mil dieciséis.
Las actividades se desarrollaron en las
instalaciones del Hotel Windsor, ubicado en calle Buenos Aires 214, en el
centro de la ciudad.
Contó con la participación de ochenta y
cinco asistentes entre magistrados, funcionarios y empleados de las escuelas
judiciales pertenecientes a la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires y a las
provincias argentinas de Catamarca, Chaco, Corrientes, Entre Ríos,
Formosa, Jujuy, La Pampa, Misiones, Mendoza, Neuquén, Salta, Santiago del
Estero, San Juan, San Luis, Santa Cruz, Santa Fe, Tierra del Fuego y Tucumán.
El Congreso quedó inaugurado, el día 3 de
noviembre a las 10:00 hs, con los
discursos de Juan Domingo Sesin, Presidente del Tribunal Superior de Justicia
de la Provincia de Córdoba, Rafael Gutiérrez, Presidente de la Ju-Fe-Jus y
María del Carmen Battaini, Presidenta de Reflejar.
La apertura académica estuvo a cargo del
Dr. Ricardo Pérez Manrique, Presidente de la Suprema Corte de Justicia del
Poder Judicial de Uruguay y del Dr. Armando Segundo Andruet (h) ex vocal del
Tribunal Superior de Justicia de la Provincia de Córdoba y Director del Área de
Investigaciones y Ensayos del Centro de Perfeccionamiento Ricardo C. Núñez.
La programación se estructuro en tres categorías: exposiciones, talleres y
paneles.
La categoría exposiciones hizo foco en la
presentación de las escuelas
participantes. Se destinaron diez minutos para que cada escuela exponga, según
criterio seleccionado, actividades, procesos, innovaciones, desarrollos
y experiencias que se consideraran importantes compartir.
Los talleres, en número de cuatro
abordaron: el plan de acción para la concreción del paradigma curricular del
juez; los nuevos roles de las escuelas judiciales; la resolución de los
conflictos en las escuelas judiciales;
el rol de los jueces en los procesos de diálogo y en la construcción de
consensos.
Las
conclusiones de los talleres se incluyen como Anexo 1 del presente informe.
Se
destaca la participación de las siguientes disertantes invitadas, no
pertenecientes a las escuelas judiciales y que intervinieron como animadoras de
los talleres y como panelistas: Claudia KatoK, Bettina Koch, Débora Cotichini,
Elizabet González, y Raquel Munt.
Los paneles versaron sobre dos temáticas:
acceso a justicia coordinado por
Graciela Peralta y prensa y justicia coordinado por Federico Abel.
Las conclusiones y cierre del congreso, el día cuatro de noviembre a las 19:00 hs, estuvieron
a cargo de María de las Mercedes Blanc de Arabel, Vocal del Tribunal
Superior de Justicia de la Provincia de Córdoba y Directora del Centro de
Perfeccionamiento Ricardo C. Núñez; Mario Adaro, Ministro de la Suprema Corte
de Justicia de Mendoza y Sergio González,
Vocal del Superior Tribunal De Justicia de la Provincia de Jujuy.
ANEXO 1-CONCLUSIONES DE LOS TALLERES-
TALLER 1: Plan de Acción para la
Concreción del Paradigma Curricular del Juez
Analía Pérez – Escuela Judicial de San
Juan
Más que hablar de conclusiones del Taller
para la concreción del paradigma curricular del Juez, creo que es fundamental
referir primero a la capacidad de trabajo en equipo demostrado por las escuelas
presentes, prestas a colaborar en esta concreción curricular.
Agradecer en nombre de los miembros de
Comisión Directiva a todos los participantes por los aportes realizados.
Y dejar constancia de los programas que
presentaron:
El equipo que trabajo en perfil del JUEZ
SOCIALMENTE RESPONSABLE plasmo como objetivos específicos que el juez dimensione
el impacto social de sus decisiones y que se capacite y se forme en temáticas
conflictivas y de tensión social. Para ello deberán generarse talleres de
concientización y sensibilización, con el uso del método deconstructivo, además
de convocar a organismos relacionados con temas de impacto social como los
ambientales, de género, grupos vulnerables, pueblos originarios, económicos y
de gravedad institucional. Con esto se espera aportar a un mayor entendimiento
entre la instancia judicial y el medio social, aportando a la paz social. Con
el aporte de especialistas que realicen un abordaje interdisciplinario.
El equipo que trabajo en el perfil del
JUEZ COMUNICADOR plasmo como objetivos específicos capacitar al juez para su
nuevo rol de comunicador de sus actos jurisdiccionales, brindándole
herramientas para una comunicación eficaz con el justiciable y con la sociedad,
en un marco de interinstitucionalidad. Con técnicas de oratoria y de
programación neurolingüística. Para que el juez logre una comunicación eficaz.
Para ello deberemos convocar a profesionales en comunicación social,
periodistas especializados en temas judiciales, sociólogos o
psico-socio-educadores. Mediante talleres basados en casos prácticos, análisis
de casos reales o simulaciones.
El equipo que trabajo en el perfil del
JUEZ FORMADOR plasmo como objetivos específicos promover la capacitación de los
jefes de oficina paraqué adquieran herramientas para detectar necesidades de
capacitación, planifiquen y diseñen programas de formación, con criterios
claros de evaluación. Con contenidos de fondo y de forma, de gestión y de
pedagogía. Con ello se espera que el juez logre detectar los requerimientos de
formación, sea consciente de la importancia de su rol como líder del equipo.
Debiera para ello conformarse un banco de expertos por medio de REFLEJAR con el
aporte de las escuelas. Resaltan que hay jueces y jefes de oficina que lo
hacen, con la modalidad de capacitación in office.
Ya en general es importante destacar que
este desarrollo no se agota en este taller. Es el inicio de un tiempo de
trabajo conjunto, y en esto tomo las palabras de un equipo: la idea es
compartir y capitalizar experiencias y trabajar juntos para avanzar.
TALLER 2: Los Nuevos Roles de las Escuelas
Judiciales
Alejandra Barrionuevo – Escuela Judicial
de Misiones
Planteo del problema
Cabe recordar para qué sirve la misión en
términos organizacionales. Así en cuanto:
Para los integrantes de toda la
organización judicial
Para a quienes les incumbe llevar
adelante, como en el tema que nos ocupa, las actividades del Centro o Escuela
Para los usuarios también del servicio de
justicia
Para elaborar la planificación, es decir
las actividades pertinentes para dar cumplimiento, precisamente, a la misión.
Dónde está establecida la misión?
En la resolución de los órganos superiores
de crear el Centro o Escuela, en leyes, en la Constitución
Eventualmente, en las resoluciones o
decisiones posteriores, ampliando o especificando la misión
Teniendo en cuenta lo precedente,
relatemos las misiones de los Centros o Escuelas respectivas
Hablamos en el punto primero que otras de
las funciones de la misión es servir para la planificación, y hacerla efectiva.
Específicamente para determinar las acciones inherentes al cumplimiento de
aquella. Debemos tener en cuenta que para cumplir con esto, el Centro o Escuela
tienen recursos (determinados y limitados): a) Humanos, b) Estructurales y c)
Económicos.
Vayamos nuevamente a los Centros o
Escuelas Judiciales, y en consecuencia veamos cuales son actualmente las
acciones o actividades que se están realizando
Comparemos si están acciones están
adecuadas a las Misiones respectivas
Si no es así, y comprobamos que se están
realizando actividades/acciones/tareas que exceden la Misión del Centro o
Escuela, sus consecuencias son:
Recarga de tareas en y de los componentes
del Centro o Escuela, que conlleva desánimo, desmotivación entre otros efectos
Desvío de recursos estructurales y
económicos a otras áreas, perjudicando al fin de capacitación judicial que
fueran destinados,
Por ende, falta de efectividad en las
acciones específicas de la misión del Centro o Escuela
Desconcierto de los demás integrantes de
la organización judicial, en cuanto a los fines exclusivos de la Capacitación
judicial
Incumplimiento deficiente en los objetivos
de la política institucional
Por lo cual se propone:
Revalorizar la Capacitación Judicial, como
el medio adecuado para la formación permanente y continua de los integrantes de
la organización judicial, en pro de estos y esencialmente el impacto en el
servicio de justicia.
En consecuencia, es imprescindible adecuar
las acciones y actividades de los Centros y Escuelas a la Misión y en su caso a
la visión formuladas para ellos.
Tener en consideración que lo precedente
es integrante de la política institucional de cada uno de los Poderes
Judiciales, la que se debe adecuar a los requerimientos de la sociedad a los
que están destinados. Por ello, dado el incremento en su calidad y cantidad, es
pertinente, en su caso, adecuar las estructuras respectivas para hacer un
servicio de justicia efectivo.
La misión de los Centros y Escuelas de
Capacitación es ser centros de entrenamientos en destrezas y habilidades que
cada uno necesita para desempeñarse laboralmente, inserto en un Poder del
Estado que debe responder a las demandas sociales. Es para conocimiento y
formación continua de los integrantes del Poder Judicial. También implementa
políticas públicas del Poder Judicial
La misión está enunciada en los Estatutos
y Reglamentos internos, las leyes, en la propia Constitución.
Si no están alineadas la misión y la
visión hay dispendio de recursos, se pierde el rumbo, hay muchas implicancias
pero especialmente la responsabilidad funcional e institucional. Por lo cual es
imprescindible analizar la realidad del Centro Escuela para comparar con la
Misión. En su caso, surgirán las necesidades que determinarán las acciones a
diseñar y luego implementar.
Es necesario tener en cuenta que si bien,
para la apreciar la realidad, es bueno la percepción o intuición, dado que
siempre es subjetiva es importante contar los medios y métodos técnicos para
apreciarla. En este mismo sentido, la mirada y comparación con otros
Centros/escuelas, aportan elementos para acercarse a esa realidad que se hizo
referencia.
Lo
precedente contribuye al análisis en cuanto a si los recursos -humanos,
estructurales, económicos- , asignados al Centro o Escuelas, son aptos para
lograr la eficacia y la eficiencia en el cumplimiento de la misión. Esto no se
contradice con la flexibilidad y la dinámica en el diseño de las actividades de
capacitación.
Volviendo a la realidad de los Centros y
Escuelas, se refleja como las misiones diseñadas cuando se crearon, están
excedidas. Así pueden señalarse funciones o temas como la gestión, lo de
prensa, las articulaciones con otros Poderes del Estado y la sociedad Civil.
Además se asume la coordinación de los cursos de posgrado, apalancamiento de
las Cortes, bajando las políticas institucionales de las Cortes, relevamiento
de necesidades sobre las oficinas en particular, visión estratégica de la
Escuela, campañas de concientización sobre temas emergentes. Se incluye también
capacitación sobre temas de tecnología para poder usar las herramientas,
organizadores de eventos y congresos, elaboración de protocolos, nexos con
otras oficinas, motivar y generar compromiso en los operadores judiciales, toma
de audiencias por videoconferencia, etc. Entre estas actividades, cabe señalar
entre una demanda de la necesidad,
específica. La respuesta viene desde la planificación, pero también responder
desde la espontaneidad.
Tenemos la tentación académica de
reproducir los contenidos de las especializaciones, o carreras de grado, sin
embargo el desafío es entender que capacitación judicial es otra cosa, es dar
respuestas puntuales, la coyuntura no es mala, es necesaria.
No existe una única realidad para
determinar los nuevos roles de las Escuelas Judiciales, esto depende de cada
Provincia y de la estructura y composición de las Escuelas, tal como lo expresa
REFLEJAR, al distinguir las particularidades pero también las semejanzas para
implementar acciones y directivas para contribuir a la mejora y superación. Sin
embargo, si bien la misión está clara, ´” la capacitación judicial´’, las Cortes
deben primero re examinar las misiones de los Centros y/o Escuelas, y si ella
se modificó, asignar los recursos por el cumplimiento efectivo. En este
sentido, en cuanto a los recursos humanos, reformular la capacitación interna,
incorporando nuevas materias, como las tecnológicas, la pedagogía y la gestión
judicial.
Repensar en agregar las funciones, que no
vaya en desmedro de la misión que naturalmente tienen, para evitar el desgaste
o la mala respuesta que pueda ocasionar, a fin de mantener el prestigio de la
capacitación.
En el punto de repensar la misión, es
imprescindible realizar las mediciones pertinentes para evaluar las actividades
que se están realizando, especialmente en cuanto a la asistencia de los
beneficiarios de la capacitación organizacional, diferente a la que
individualmente hagan los operadores.
En definitiva, los cambios sociales que
impactan en la actividad judicial, también deben ser mirados en cuanto a la
reformulación de la misión de la capacitación judicial. Entender la importancia
de ella como integrante del servicio de justicia. Por ello, coadyuvará el
diseño actual de la misión, la optimización de los recursos y el prestigio de
la capacitación judicial, para los propios operadores y también para la
sociedad destinataria.
TALLER 3: La Resolución de los Conflictos
en las Escuelas Judiciales
Graciela Neirot – Escuela Judicial de
Santiago del Estero
Planteó un taller a partir de la idea de
visibilizar el conflicto de los organismos judiciales como un punto de inicio
para el cambio. Propuso como idea capitalizarlos para delinear los cambios.
Distinguió:
Conflicto real
Conflicto irreal
Conflicto inventado
Conflicto real es el más fácil de abordar,
señaló. El conflicto irreal es el conflicto inventado que parte, generalmente,
de una percepción errónea. Suceden, a veces, en las organizaciones, la
comunicación equivoca.
Para superar conflictos por percepción
errónea hay que tratar de aclarar la actuación para desmitificar la percepción.
Los malentendidos también surgen de interpretaciones erróneas por lo que es
necesario generar espacios de dialogo con el líder y demás integrantes de la
organización.
Conflicto inventado se provoca con
intención deliberada de precisamente, generar el conflicto. Ej. mobbing
En estos casos es necesario trabajar desde
la prevención para evitar que el conflicto se enquiste o se afiance.
Planteó una actividad CARTAS ANONIMAS. Cada
grupo debía determinar la existencia de un conflicto en la escuela; las
amenazas y consecuencias de no discutirlo, el impacto en lo personal, en lo
interpersonal y en el equipo de trabajo.
Describir temas, conflictos y/o la
situación que mejor lo haga comprensible para los demás.
También propuso una segunda actividad en
la que cada grupo debía definir conjuntos de valores y principios éticos que
sustentaran la labor propia y de la escuela como servicio.-
Los valores y principios para la
organización como grupo de trabajo se señalaron: confianza, cooperación,
generosidad, respeto, compromiso, honestidad, esfuerzo, pro-actividad, apertura
al dialogo, eficiencia, confiabilidad, calidad, vocación de servicio,
profesionalidad, jerarquización, responsabilidad.
Y en el servicio se han fijado: seriedad,
eficiencia, confiabilidad, calidad, inclusión, justicia, equidad,
credibilidad.-
Luego Bettina Koch invitó a los grupos a
participar de otra actividad en la que debía identificar un conflicto propio o
común de una escuela judicial y relacionar con los valores y principios
detallados.
Finalmente propuso otra actividad que la
denominó MASTERMIND. Cada grupo debía elegir un tema de los que emergieron como
problemáticas. Se advirtió que todos los planteos resultan problemas de
comunicación. Qué preguntas pueden surgir de este taller para tener respuestas
adecuadas a cada uno.
Su propuesta como disertante fue ponernos
anteojos y mirar los problemas con otras perspectivas para observar el
conflicto con mayor objetividad.
TALLER 4: El Rol de los
Jueces en los Procesos de Diálogo y la en la Construcción de Consensos.
Alejandra María Luz
Caballero
Este taller tuvo como objetivo rdefinir las
herramientas para que el juez en particular, y los operadores de justicia en
general, puedan cumplir con el rol de constructores de la paz y de la justicia.
De
él surgieron las siguientes conclusiones:
1.
La fisonomía de la conflictividad actual supera el ámbito individual y requiere
un análisis integral y herramientas de resolución que abarquen su complejidad,
articuladas en forma mancomunada con los otros poderes del
Estado.
2. Son necesarias acciones dirigidas a:
-transponer los límites de la preparación
tradicional de los operadores de la justicia, para dotarlos de herramientas
superadoras de los clásicos conflictos individuales, conscientes de que al juez
también le corresponde asumir roles distintos a los tradicionales, tales como
hacer frente a la falta de seguridad y promover la prevención.
- afrontar y procurar superar el
desacompasamiento de los tiempos: el que requiere la sociedad y el que maneja
la justicia.
- asumir métodos eficientes de
capacitación de los operadores, incorporando las herramientas que aportan otras
disciplinas capaces de dar respuestas a los requerimientos sociales actuales.
-
promover y fortalecer los procesos alternativos y el diálogo como
instrumentos para comprender al otro desde la diversidad y para fomentar la
cohesión.
- generar dispositivos para el abordaje
del conflicto en su etapa de gestación, instalando la idea de alerta para la
detección temprana de los conflictos.
- fomentar la participación civil para dar
respuestas sustentables y acceso a la justicia, con la implementación de los
lineamientos que aportan las Reglas de Brasilia.
- asumir la función pedagógica de los
operadores del derecho para definir acciones sustentables y contribuir en mejor
medida a la paz social y al acceso a la justicia, especialmente de los más
vulnerables.